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Agua embotellada contiene más microplásticos que agua de grifo: Estudio

“Para que nuestros ríos lleguen sanos al mar”

Recurso Hídrico y Contaminación

Los microplásticos se han encontrado en diferentes productos de uso y consumo humano, desde los alimentos, hasta el maquillaje o productos de cuidado de la piel. Ahora, una investigación publicada en la revista Scientific Reports revela la presencia de microplásticos en agua embotellada, hecho que despierta mayor alarma debido a que la exposición a estás partículas es cada vez mayor puesto que la acumulación de residuos plásticos no deja de crecer.

Las Naciones Unidas han alertado sobre el peligro que representan los microplásticos para la salud humana, los ecosistemas y la vida silvestre, debido a que los químicos que contienen estas partículas pueden ocasionar alteraciones genéticas, complicaciones en el desarrollo cerebral, efectos endocrinos y problemas respiratorios, entre otros.

En cuanto a los efectos de estos micro residuos en la fauna, se sabe que cuando los animales ingieren microplásticos, estos pueden causar efectos como la reducción en la ingesta de alimentos, asfixia, cambios de comportamientos e, incluso, alteración genética.

Algunos expertos han declarado que los riesgos de salud asociados a microplásticos dependen del grado de exposición a estos, la ruta de ingreso al organismo y factores como el estado de salud y nutrición de cada persona. No obstante, evitar o disminuir la ingesta de estas partículas resulta cada vez más difícil, ya que están contaminando no sólo el medio ambiente, sino lo que comemos, los productos de cuidado personal, el aire y hasta el agua que tomamos. Para beber, una botella de agua era lo más sano, hasta que los investigadores encontraron microplásticos en ella. ¡Entérate!

¡Encuentran microplásticos en agua embotellada!

Un estudio publicado en la revista Scientific Reports, en el que participan diversos investigadores miembros de Enviroplanet, indica que hay microplásticos en el agua embotellada.

De acuerdo con información de El Economista, esta investigación sometió a prueba el agua embotellada de las cinco marcas principales en el mercado, cuyo dominio representa el 40 % del mercado español de este producto. Se analizaron 45 litros contenidos en botellas PET de 1,5 litros de cada marca. Los expertos compararon la concentración de microplásticos (MP) y otros materiales artificiales no plásticos (PANP) en el agua de botella con la del agua de grifo.

Para sorpresa de los investigadores, los resultados de este estudio concluyeron que la concentración de microplásticos en agua embotellada es considerablemente mayor a la que hay en el agua de la llave.  En el agua embotellada se encontraron 0.7 MP/ L y 1.70 PANP/L, mientras que en el agua de grifo se hallaron 0.0125 MP/L y 0.0322 PANP/L.

¿Qué tipo de microplásticos hay en el agua embotellada?

Según los autores de esta investigación, el agua embotellada contenía fragmentos de poliésteres en tonalidades transparentes y blancas, lo que coincide con la composición de las botellas de agua, y fibras de celulosa de varios colores.

En contraste, se logró identificar mayor diversidad de polímeros en el agua de la llave, entre ellos poliésteres, poliamidas, polímeros acrílicos y poliolefinas, cuyo origen puede ser diverso, ya que pueden desprenderse de los textiles sintéticos, envases de alimentos, pinturas o electrodomésticos.

Los expertos afirman que la presencia de tereftalato de polietileno (PET, por sus siglas en inglés) se encontró en las muestras provenientes tanto de botellas, como de la llave, aunque es menor la cantidad de partículas de este material en el agua corriente.

¿Un nuevo peligro para la salud?

El estudio señala que, hasta el momento, no hay investigación que compruebe la inocuidad o perjuicio a la salud de beber agua contaminada con microplásticos, aunque los autores de este hallazgo indican que es poco probable que las micro partículas ingeridas de esta forma causen efectos negativos en la salud, ya que la cantidad total que entra al organismo es ínfima.

Cabe preguntarse qué pasa cuando cantidades “inofensivas” de microplásticos logran entrar a nuestro cuerpo por medio de diversos alimentos, bebidas, productos de cuidado personal, o en el simple contacto con el medio ambiente, ¿acaso su suma sigue siendo inofensiva? En abril, algunos médicos aseguraron que los microplásticos en el organismo pueden llegar a ser mortales porque aumentan la posibilidad de un accidente cerebrovascular, ataque cardíaco o muerte prematura debido a la obstrucción de vasos sanguíneos contaminados con estos micro residuos plásticos.

Por ello, la intervención de los gobiernos y organizaciones en el tratamiento y reducción de los residuos plásticos que se generan de manera anual es urgente, así como regular la producción de plástico vírgen y promover políticas que alarguen el ciclo de vida útil de los productos plásticos y regulen las industrias, como la textil, que elaboran productos a base de este material de difícil degradación y altos costos para la salud.

Fuente:

 

 

Junio, 2024